TPM Baja en Diciembre: Créditos Más Baratos y Dólar Estable

El Banco Central está por cambiar de marcha: de frenar la inflación a reactivar la economía. Para tu bolsillo, esto se traduce en créditos más accesibles y un horizonte donde el precio del pan y la bencina dejan de ser una sorpresa cada mes.

Como les he explicado antes, pensar en la Tasa de Política Monetaria (TPM) es como pensar en el termostato de la casa. Si hace mucho frío (la economía se enfría), lo subes. Si hace un calor sofocante (la inflación se dispara), lo bajas. Después de un largo período con el termostato alto para combatir la inflación, el Banco Central tiene espacio para empezar a bajarlo. Los datos que veremos en el próximo Informe de Política Monetaria (IPOM) apuntan a que podemos relajarnos un poco, porque la meta de inflación del 3% se ve mucho más cerca.

Este no es solo un dato técnico para analistas. Es la señal que esperaban las familias y las pymes para planificar. Con la inflación controlándose antes de lo previsto, el costo de la vida deja de subir de manera descontrolada. El dólar, que hoy cotiza en $928, pierde uno de sus motores de alza más potentes.

• El Dato: La convergencia de la inflación al 3% ahora se proyecta para el primer trimestre del 2026, casi dos trimestres antes de lo estimado en septiembre.
• Por qué importa: Una inflación predecible es el mejor aliado para tu presupuesto mensual. Te permite ahorrar sin que el dinero pierda valor rápidamente, y da certeza a los negocios para invertir y crear empleo. Es el suelo firme que necesitamos.
• Lo que viene: Una baja casi segura de la TPM en diciembre, acercándola a un nivel «neutral». Esto hará que los créditos de consumo e hipotecarios empiecen, lentamente, a ser menos costosos.

Del «Modo Emergencia» al «Modo Crecimiento»: El Cambio de Chip del Banco Central

Durante años, la conversación económica giró en torno a apagar el incendio inflacionario. Se subieron las tasas de interés para que pedir un préstamo fuera más caro, enfriando la demanda y, con ella, los precios. Fue una medicina necesaria, pero amarga. Ahora, con la inflación encauzada, el diagnóstico cambia.

El Banco Central puede dejar de mirar solo el termómetro de los precios y empezar a preocuparse de que el paciente –la economía– se recupere con fuerza. Las proyecciones de un crecimiento del PIB entre 2.3% y 2.5% para 2025 no son para echar cohetes, pero muestran una base sólida. Significa que la demanda interna, lo que tú y yo gastamos en el supermercado o en mejorar la casa, se mantiene como motor.

¿La mejor noticia? Que esta corrección de expectativas le da espacio al Banco Central para actuar. Ya no está contra las cuerdas. Tiene el margen, ese “sandbox” del que hablan los técnicos, para apoyar la actividad sin temor a que los precios se disparen otra vez.

“Estamos presenciando el cambio de temporada en la política monetaria. Pasamos de un invierno restrictivo a una primavera de normalización. La TPM se acerca a su tasa natural, que es como encontrar el punto justo donde el dinero en la economía ni sobra ni falta para crecer sanamente.”

Créditos Más Baratos y un Dólar Menos Volátil: Lo que Esto Significa para Tu Día a Día

Aquí es donde la teoría toca tu puerta. Una TPM más baja se filtra, con el tiempo, a toda la cadena de crédito. Los bancos gradualmente ofrecerán tasas más convenientes para comprar auto, renovar la cocina o consolidar deudas. No será de la noche a la mañana, pero la tendencia será tu amiga si estás pensando en endeudarte de manera inteligente.

Para quienes miran con nerviosismo el tipo de cambio, hay un alivio. Un escenario de inflación controlada le quita presión alcista al dólar. Seguirá fluctuando, hoy en $928, movido por el cobre o el ánimo global, pero perderá ese componente de “miedo local” que lo hacía subir con cualquier noticia. La UF, en $39.643, seguirá su camino predecible, clave para quienes tienen crédito hipotecario.

El verdadero lujo en economía es la predictibilidad. Y eso es lo que se está construyendo. Un horizonte donde puedes sentarte a planificar el presupuesto del próximo año sin la sombra de una sorpresa en los precios. ¿No es ese, al final, el cimiento de cualquier proyecto familiar o emprendedor?