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$946
$1.073
$39.633
$69.542
El Barómetro Unab señala resiliencia, pero la economía chilena camina sobre una cuerda floja. El dólar se mantiene en $946, una falsa calma que expertos ven vulnerable ante un mercado global volátil y presiones internas.
El informe de la Universidad Andrés Bello para septiembre pintó un panorama con luces y sombras. Habló de resiliencia, de tendencia positiva. Eso fue ayer. Hoy, a 10 de noviembre, los números fríos del mercado exigen una lectura menos complaciente y más de calle. La economía no se mide solo por diagnósticos, sino por el flujo de capitales, el precio de la divisa y el poder adquisitivo del ciudadano de a pie en Santiago, Concepción o Antofagasta.
Los indicadores clave de este minuto no muestran euforia, sino precaución.
- El Dato: El Dólar Observado se ancla en $946, mientras el Euro cotiza a $1.073. La UF, termómetro interno, está en $39.633.
- Por qué importa: Un dólar estable por debajo de los $950 puede leerse como fortaleza, pero en el contexto actual es un imán para la especulación. Afecta directamente los costos de importación y frena el ajuste necesario en las cuentas externas. La UF, por su parte, sigue su escalada silenciosa, encareciendo créditos hipotecarios y reajustes de arriendo, presionando el bolsillo ya golpeado por la inflación.
- Lo que viene: La presión sobre el Banco Central será feroz. El mercado prueba los límites. Cualquier señal de debilidad en los fundamentos o un viraje en la Fed estadounidense puede desencadenar una corrección violenta del tipo de cambio. No estamos en zona de confort, estamos en zona de vigilancia extrema.
Resiliencia Sí, Pero Con Los Precios Al Límite
El barómetro habla de adaptabilidad. En la práctica, esa adaptación tiene un costo que están pagando las pymes y los hogares. La supuesta fortaleza del tipo de cambio es, en parte, artificial, sostenida por un diferencial de tasas que atrae capitales golondrina. Es dinero caliente que busca rendimiento, no inversión productiva. Este flujo puede revertirse en horas, dejando al descubierto vulnerabilidades.
El Euro a $1.073 refleja una moneda europea con sus propios problemas, pero también indica que los capitales no ven a Chile como un refugio absoluto. La conexión con la UE es vital para nuestras exportaciones no cobre, y un euro débil encarece nuestros productos allí. El análisis no puede ser insular. Lo que decide la Fed en Washington o el BCE en Frankfurt termina definiendo el precio de la parrilla en la Vega Central.
"Un dólar contenido artificialmente es una bomba de tiempo para la competitividad. Estamos exportando a precios globales con costos internos que no bajan. Ese spread lo absorbe la industria nacional y, finalmente, el empleo."
La UF: El Termómetro Que Marca Fiebre En Las Deudas
Mientras el debate se centra en el dólar, la Unidad de Fomento sigue su marcha implacable. Los $39.633 no son un número inocuo. Son la base legal para recalcular deudas a largo plazo. Cada peso que sube la UF es un peso menos para el consumo final. Este reajuste automático, indexado a la inflación pasada, actúa como un freno de mano para la reactivación.
El Banco Central enfrenta un dilema de manual: si baja la tasa para impulsar el crédito, arriesga una fuga de dólares y presiona la divisa. Si la mantiene alta para contener el tipo de cambio y la inflación, asfixia a los deudores en UF y frena la inversión. Este es el verdadero nudo gordiano que el informe de resiliencia no desata. La economía chilena no se recupera solo con buenos indicadores de un mes, sino con señales claras de hacia dónde va el costo del dinero y la vida. La pregunta para el mercado es clara: ¿cuánto tiempo más puede el dólar resistir en este nivel sin que los fundamentos internos le pasen la cuenta?